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ESTUDIO PARA CÉLULAS

Semana 1
Semana 2
Semana 3

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Lunes 7 de julio

 

LLAMADO A LA SANTIDAD (A SER SANTO)

 

“Más bien, sean santos en todo lo que hacen, porque Dios quien los llamó es santo. Pues está escrito: Sean santos, porque Yo Soy Santo”.

1 Pedro 1:15-16 (La Palabra de Dios para todos)

 

1. Es un mandato (1 Pedro 1:15-16).

Pero ahora sean santos en todo lo que hagan, tal como Dios, quien los eligió, es santo. 16 Pues las Escrituras dicen: «Sean santos, porque yo soy santo». Es un tiempo donde Dios hace un llamado a cada uno de nosotros para que busquemos la santidad. Pero lo primero que nos enseña es que la santidad es un mandato, es decir, una orden, instrucción, un encargo que tiene que ir acompañado de la obediencia para que se lleve a cabo y se pueda cumplir.

Si tuviésemos que evaluar nuestra obediencia, del 1 al 10, ¿cómo nos calificamos? ¿Te cuesta ser obediente? Necesitamos que la obediencia sea una característica en nuestras vidas, así como lo fue en la vida de Jesús. 

2. ¿Qué es santidad?

Al leer la Biblia, podemos encontrar que la palabra santidad aparece muchas veces, lo cual nos demuestra que es de mucha importancia para Dios que vos y yo nos santifiquemos. El ser santo es ser apartado, separado, para Dios. 

 

Líder: preguntarle a los niños y preadolescentes de que cosas ellos tendrían que apartarse para estar más cerca de Dios. Por ejemplo (las cosas que veo en la televisión o escucho y hacen que mi corazón se contamine, de las malas palabras, cambiar mi comportamiento, dejar los pensamientos negativos, las mentiras, hay cosas de las cuales tendremos que dejar para agradarle solo a Dios.

Unos de los atributos de Dios es ser Santo, por eso desea que vos y yo también lo seamos.

Allí donde estás, cerrá tus ojos por un ratito y pensá en todas esas cosas que mencionamos y vos te das cuentas que tenés que dejar y oremos juntos: “Señor Jesús, hoy vengo a Ti porque te necesito, quiero pedirte perdón por mis pecados, por mis palabras, por las cosas que hago, que dejé entrar a mi corazón y me alejan de Tu presencia. Hoy me vuelvo a Ti, te pido que me limpies y me laves con Tu sangre. Yo declaro que mi vida es limpia, te pido que me ayudes a ser obediente, porque quiero ser Santo como Tú eres Santo.

3. Llamado a la santidad (Mateo 6:9-10).

9 Ora de la siguiente manera:

Padre nuestro que estás en el cielo,

que sea siempre santo tu nombre.

10 Que tu reino venga pronto.

Que se cumpla tu voluntad en la tierra

cómo se cumple en el cielo.

 

Podemos ver que Jesús nos dejó una oración modelo para que podamos buscarle y tener un tiempo con Él. Nos da la oportunidad de llamarle a Dios, Padre, no solo que somos Su creación, sino que también, hijos. Reconocemos que no hay otro como nuestro Dios, Él es grande, poderoso, lleno de amor y de bondad, un padre presente, que está en cada momento con nosotros. Pero también es un Dios santo, santo por siempre, por la eternidad. Oremos para que Su reino se establezca sobre nuestras vidas, nuestro hogar, nuestro barrio y país. 

 

Maestro: antes de concluir con esta clase, vamos a hacer un juego para que les quede plasmada la enseñanza y la puedan aplicar a situaciones cotidianas. Estuvimos hablando acerca de ser santos, de apartarnos para Dios, dejando aquellas cosas que no me permiten buscar la santidad y esforzarme en obediencia en cumplir Su voluntad.

Este juego se llama ¿A mi manera? ¿O a la manera de Dios?

Vamos a dividir a los asistentes de la Célula en dos grupos: 

  1. Va a representar: a mi manera 

  2. Va a representar: a la manera de Dios.

 

Veremos distintas situaciones cotidianas:

  • Tenés que compartir tus juguetes con tus hermanos o amigos,  ¿cómo actúas?

  • Viene un compañero de la escuela y te empuja, ¿cómo actúas?

  • Mamá te pide en casa que le ayudes a levantar la mesa y lavar los platos, ¿cómo actúas?

  • Ves a un niño que viene en bicicleta y se cae en la calle, lo ayudas o lo dejas en el piso, ¿cómo actúas?

  • Me piden el domingo después de la Escuela Kids que le ayude a limpiar el salón, pero todos los chicos se fueron y quedé solo para limpiar,  ¿cómo actúas?

 

  • Venís andando en bicicleta, llegando al semáforo y justo se pone en rojo, cruzas o frenas,  ¿cómo actúas?


 

Que cada día, en cada oportunidad que tengamos, pongamos por obra cada enseñanza que recibimos de la Palabra de Dios, que seamos obedientes en todo y que nos guardemos para agradar a nuestro papá Dios.

 

Conclusión: Dios nos llama a ser santos.

Oración: Jesús, que seamos obedientes a Tu mandato.

Acción: Niño: Marca el camino que te lleva a Jesús para ser santo como Él y luego colorea la imagen.


 

 



 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


 

Preadolescente: Lee con mucho cuidado las siguientes situaciones y luego responde.

 

1- Un día, al terminar las clases, tus compañeros te invitan a jugar en la casa de uno de ellos. Tú sabes que tus padres te esperan después de las clases. Tus compañeros te animan diciéndote que puedes decirles que el maestro los detuvo para terminar un proyecto después de las clases. DETENTE: ¿Qué es lo que debes hacer? PIENSA: ¿La mentira tiene lugar en tu vida como hijo de Dios? ¿Harás lo mismo que los demás? ¿Harás algo diferente, aun cuando sabes que perderás popularidad entre tus compañeros? ACTÚA: ¿Qué harás?: _______________________________________________________-_______________________________________________________

2. Tú y uno de tus hermanos son muy buenos dibujantes, pero tu hermano es elegido para participar en un concurso muy importante. Tú piensas que eres mejor y te parece muy injusta la elección. Te sientes tan enojado que deseas que tu hermano pierda el concurso. DETENTE: Reflexiona en tus sentimientos. PIENSA: ¿La envidia, el resentimiento, los malos deseos son características de un hijo de Dios, separado para Él? ACTÚA: ¿Qué harás?

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Lunes 14 de julio

 

¿CÓMO SANTIFICARNOS?

 

“Hazlos santos con tu verdad; enséñales Tu Palabra, la cual es verdad”.

Juan 17:17 (Nueva Traducción Viviente)

 

Hoy estudiaremos cuan importante es la Palabra de Dios en nuestras vidas.

1. La Palabra, viva y eficaz (Hebreos 4:12).

'Pues la palabra de Dios es viva y poderosa. Es más cortante que cualquier espada de dos filos; penetra entre el alma y el espíritu, entre la articulación y la médula del hueso. Deja al descubierto nuestros pensamientos y deseos más íntimos'.

Podemos ver que la Palabra de Dios tiene poder y es viva, puede transformar y cambiar vidas, tiene el poder de entrar hasta lo más profundo de nuestro ser. Han pasado muchos años desde que la Biblia se escribió, pero la Palabra de Dios no cambia, todo lo que encontramos en ella son palabras poderosas que cuando las creemos y declaramos, cobran poder y obran para el bien nuestro.

Es eficaz, es decir, que no solo tiene poder, sino que va a producir resultados en la persona que la declare y la reciba.

Maestro: realiza la siguiente ilustración. Para ello, vas a necesitar un vaso con agua sucia y uno con agua limpia. 

Cuando comenzamos a incorporar el agua limpia al vaso que está sucio, comienza a aclararse. De la misma manera sucede en nosotros. El pecado ensucia nuestras vidas y nos aleja de Dios, pero cuando tomamos la decisión de leer la Palabra de Dios, comienza a limpiarnos, purificarnos, trae vida y somos transformados.

 

2. Más cortante (Hebreos 4:12).

También en el libro de Hebreos se nos enseña que la Palabra de Dios es más cortante que espada de dos filos, que penetra hasta lo más profundo de nuestro ser. 

La Palabra nos permite ver lo profundo y escondido que muchas veces está guardado en nuestro corazón: pensamientos negativos, pensamientos malos acerca de nosotros mismos, sentimientos de enojo u odio a personas que nos hicieron daño, recuerdos de situaciones vividas que muchas veces no queremos recordar porque nos hace poner tristes. 

Al declarar la Palabra de Dios, entra a nuestro espíritu y comienza a producir cambios en nuestro interior y en nuestra manera de pensar, trayendo resultados positivos que se reflejan en nuestro exterior (actitudes, palabras, reacciones, etc.).

Te invito a que juntos podamos orar: llevá una mano a tu cabeza y la otra a tu corazón y repetí:

 

“Señor Jesús, sé que estás aquí, Tú estás en medio nuestro, por eso quiero entregarte todo lo que me hace mal y causa dolor en mi vida, muéstrame, Espíritu Santo, cómo está mi interior, porque quiero ser purificado por Tu Palabra, Dios. Hoy te entrego mi tristeza, mi dolor, mi enojo y te pido que me sanes, que me transformes, en el Nombre de Jesús. Amén”. 

 

3. La Palabra de Dios nos santifica (Juan 14:6).

La Biblia nos enseña el camino por el cual vos y yo debemos andar, nos aconseja a la hora de tomar decisiones, nos muestra lo que nos conviene y lo que no. Debemos pedirle al Espíritu Santo que nos ayude a tener nuestro oído atento a cada consejo y guía que el Señor nos da.

“Jesús le contestó:

—Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie puede ir al Padre si no es por medio de mí” (San Juan 14:6).

Tenemos un solo camino que nos conduce a Dios, y es a través de Jesús. Que cada día podamos tener una relación íntima con Jesús, donde nos tomemos un tiempo para estar con Él, hablar, contarle cómo estamos, abrir nuestro corazón hacia Él, reconociendo que necesitamos que se manifieste en nosotros, pero también, que Él nos hable. Si todavía no has podido tener un tiempo de comunión con Jesús, o si no lo aceptaste como tu Señor y Salvador, te invito a que lo hagamos juntos.

“Señor Jesús, hoy vengo a buscarte a Ti, porque entiendo que te necesito.  Te pido perdón por mis pecados, por mis pensamientos malos, por las cosas que hago mal, hoy vuelvo mi vida a Ti. En este momento quiero recibirte en mi corazón como mi Señor y mi Salvador. Anota mi nombre en el libro de la vida, quiero caminar siempre tomado de Tu mano, gracias, Jesús. Amén”.

 

Conclusión: La Palabra de Dios es viva y eficaz y nos corrige día a día.

 

Oración: Jesús, muéstranos a través de Tu Palabra cuando nos hablas y no te escuchamos. 

 

Acción: Niño: Querido líder llevar distintos materiales para confeccionar una espada (la Palabra de Di os) para cada niño, que ellos la hermoseen y se la puedan llevar a su hogar, en la misma escribir: “La Palabra es viva y eficaz”.

 

Preadolescente: Lee Hebreos 4:12 (Traducción Lenguaje Actual) y luego completa.

“Pues la __________ de ________ es ________ y ____________. Es más cortante que _________ ________de ____ _______; penetra entre el _________ y el ____________, entre la ______________ y la _____________ del hueso. __________ al descubierto ____________ _________________ y ___________ más _____________” Hebreos 4:12

 

Con tus palabras, explica el significado de este versículo:

Lunes 21 de julio

 

¿LA RAÍZ DE TODOS LOS MALES?

 

“Porque todos los males comienzan cuando solo se piensa en el dinero. Por el deseo de amontonarlo, muchos se olvidaron de obedecer a Dios…”. 1 Timoteo 6:10 (Traducción Lenguaje Actual)

 

1. El amor al dinero (1 Timoteo 6:9-10).

“Pero los que viven con la ambición de hacerse ricos caen en tentación y quedan atrapados por muchos deseos necios y dañinos que los hunden en la ruina y la destrucción. Pues el amor al dinero es la raíz de toda clase de mal; y algunas personas, en su intenso deseo por el dinero, se han desviado de la fe verdadera y se han causado muchas heridas dolorosas”.

La Palabra de Dios nos enseña que el amor al dinero es la raíz de todos los males, y podríamos pensar, ¿cómo puede ser así cuando el dinero es tan necesario diariamente para vivir? En cada situación diaria notamos que necesitamos dinero: vas a comprar alimentos al supermercado y necesitas dinero para abonarlo, vas a la tienda a buscar ropa y al comprar, es necesario que lo pagues, el dinero es algo que usamos todos los días. Pero ¿Cuál sería el mal del dinero? El mal sería que yo empiece a amarlo, a tener un deseo por cada día, tener más y más, que ese deseo me lleve a hacer cosas malas para conseguirlo.

El deseo de nuestro papá Dios es bendecirnos, prosperarnos, pero para ello, debemos andar en santidad como hemos aprendido las semanas anteriores y al obedecer a Su Palabra recibiremos bendiciones abundantes que no tendremos necesidad de ninguna cosa.

No dejes contaminar tu corazón al mirar a tu alrededor, muchas veces queremos tener lo que otros tienen, una mejor bicicleta, otras zapatillas, una ropa mejor, un celular porque veo que mis amigos lo tienen. Si aprendes amar a Dios con tu corazón y a obedecerlo en todo lo que nos pide, vas a hacer prosperado y te vas a sorprender de todo lo que Dios te quiere dar.

 

2. ¿Quién es mi Señor?

Al hacernos esta pregunta, nos lleva a ver a quién estamos sirviendo, donde está puesto nuestro corazón, quien ocupa el primer lugar en nuestras vidas.

Yo no puedo estar en el medio, y que la mitad de mi cuerpo vaya para un lado, y la otra mitad para el otro.

Hagamos una ilustración: Maestro, llama a tres niños de la clase, pondrás a un niño en el medio y los otros dos, uno a cada lado. Se tomarán de la mano, y a la cuenta de tres, cada uno comenzará a tirar para su lado, con mucho cuidado para que no se golpeen, ¿Qué pasaría?, ¿puede el niño ir hacia los dos lados al mismo tiempo?

¡Claro que no!; o va con uno, o va con el otro. De la misma manera sucede con nuestro Dios, debo decidir en mi corazón servirlo solo a Él, aborreciendo, dejando de lado, sacando de mi corazón aquellas cosas que me alejan o me separan de lo que el Señor quiere para mi vida. Debo serle Fiel a mi Señor, porque siempre Él es fiel conmigo.

 

3. De acuerdo con La Palabra veremos las siguientes acciones: (2 Samuel 12:1-4; Mateo 19:16-24).

Por lo tanto, el Señor envió al profeta Natán para que le contara a David la siguiente historia:

—Había dos hombres en cierta ciudad; uno era rico y el otro, pobre. El hombre rico poseía muchas ovejas, y ganado en cantidad. El pobre no tenía nada, solo una pequeña oveja que había comprado. Él crio esa ovejita, la cual creció junto con sus hijos. La ovejita comía del mismo plato del dueño y bebía de su vaso, y él la acunaba como a una hija. Cierto día llegó una visita a la casa del hombre rico. Pero en lugar de matar un animal de su propio rebaño o de su propia manada, tomó la ovejita del hombre pobre, la mató y la preparó para su invitado (2 Samuel 12:1-4).

¿Cómo ven ustedes esta acción del hombre rico? ¿Qué tendría que haber hecho? La avaricia, el querer tener más, lo llevó a robar la única ovejita que tenía el hombre pobre, siendo que él tenía mucha más ovejas de las cuales podría haber tomado.

Que el Señor Jesús guarde nuestro corazón del querer tener más, nos libre del amor, al dinero y nos ayude a obedecer su palabra.

 

Encontramos otro ejemplo: 

Alguien se acercó a Jesús con la siguiente pregunta:

—Maestro, ¿qué buena acción tengo que hacer para tener la vida eterna?

—¿Por qué me preguntas a mí sobre lo que es bueno? —respondió Jesús—. Solo hay Uno que es bueno; pero para contestar a tu pregunta, si deseas recibir la vida eterna, cumple los mandamientos.

—¿Cuáles? —preguntó el hombre.

Y Jesús le contestó:

—“No cometas asesinato; no cometas adulterio; no robes; no des falso testimonio; honra a tu padre y a tu madre; ama a tu prójimo como a ti mismo”.

—He obedecido todos esos mandamientos —respondió el joven—. ¿Qué más debo hacer?

Jesús le dijo:

—Si deseas ser perfecto, anda, vende todas tus posesiones y entrega el dinero a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo. Después ven y sígueme.

Cuando el joven escuchó lo que Jesús le dijo, se fue triste porque tenía muchas posesiones.

Entonces Jesús dijo a sus discípulos: «Les digo la verdad, es muy difícil que una persona rica entre en el reino del cielo. Lo repito: es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que un rico entre en el reino de Dios» (San Mateo 19:16-24).

El joven rico pensaba que todo estaba bien, que estaba haciendo lo correcto, cumpliendo los mandamientos, pero no se podía dar cuenta de lo que había en su corazón, que lo llevo a perder la oportunidad de estar con Jesús, fue más fuerte el amor por las cosas materiales que él poseía, que el amor por Jesús. 


 

Conclusión: La raíz de todos los males es el amor al dinero.

 

Oración: Ayúdanos, Señor, a amarte cada día más a Ti que al dinero o lo material.

 

Acción: Expresión libre.

Preadolescente: Al lado de cada frase escribe si es V(verdadero) o F(falso), de acuerdo a lo que leas en Mateo 19:16-24.

El joven rico preguntó a Jesús qué debía hacer para tener vida eterna. 

Jesús le dijo al joven rico que le diera todo su dinero.

El joven rico estaba feliz de regalar su riqueza.

Jesús dijo que es fácil para una persona rica entrar al cielo. 

Jesús comparó entrar al cielo con un burro pasando por el ojo de una aguja.

Jesús dijo que con Dios, todas las cosas son posibles. 

El joven rico decidió seguir a Jesús inmediatamente. 

Jesús dijo a sus discípulos que serían recompensados por seguirlo. 

Jesús nos enseña que confiar en la riqueza es más importante que confiar en Dios.

 

Lunes 28 de julio

 

ROBO A DIOS

 

“¿Robará el hombre a Dios? ¡Pues ustedes me han robado! Pero dicen: ¿En qué te hemos robado? ¡En los diezmos y en las ofrendas!”.

Malaquías 3:8 (Reina Valera Actualizada)

 

1. Robo (Mateo 6:21).

Si hoy nos preguntáramos, ¿vos robás? Obvio que la respuesta sería NO. Hay muchas acciones que vivimos diariamente que quizás nos parezcan que son normales, pero terminan convirtiéndose en robo como, por ejemplo:

  • Encontrás algún útil escolar tirado en el piso del salón, lo tomás y en vez de dejarlo o preguntar de quién es te lo guardas.

  • Querés comprar alguna golosina y tomás dinero de la billetera de mamá o papá sin permiso.

  • Vas a jugar de un amigo y como te gusto un juguetito, te lo llevás sin preguntarle a su dueño.

 

Todo lo que yo tome sin permiso del dueño y me lo llevo sería robar. Si en algún momento tomaste algo que no era tuyo y te adueñaste de eso, hoy vamos a orar juntos para que Jesús perdone y libre tu vida: Señor Jesús, hoy vengo a Tu presencia, porque me doy cuenta de que tomé cosas que no eran mías, te pido perdón porque tuve una mala actitud, me arrepiento y te pido que me limpies y me hagas libre, para no volver hacerlo. Amén. 

 

2. Todo es Suyo.

«¿Habrá quien pueda robarle a Dios? ¡Pues ustedes me han robado! Y, sin embargo, dicen: “¿Qué quieres decir con que te hemos robado?” ¡Pues me han robado en sus diezmos y ofrendas! Malaquías 3:8

Encontramos este versículo donde el Señor nos dejó un mandamiento por cumplir, una orden por seguir es que le demos a Él los diezmos y ofrendas, sería lo que él nos pide y en obediencia le damos al Señor. Todo, todo, absolutamente todo es de Dios. Es rey de reyes y Señor de Señores, Él es el dueño del oro y de la plata, es dueño de todo, aun todo lo que somos, lo que tenemos vos y yo es por medio de Él. 

 

3. Maneras de dar (Deuteronomio 12:6-7)

Holocaustos, sacrificios, diezmos, ofrendas…

 Hay muchas maneras en las cuales podemos dar y ser de bendición para otras personas. 

“Para llevar sus holocaustos y sacrificios, diezmos, ofrendas elevadas, sus votos y ofrendas voluntarias, y las primicias de sus vacas y de sus ovejas;

allí también comerán ustedes y sus familias delante del Señor su Dios, y se regocijarán en todo lo que hagan y en lo que el Señor su Dios les haya bendecido”. Deuteronomio 12:6-7

  • Holocaustos: según la concordancia, significa escalón, como subiendo humo, ofrecer, quemar, subir. 

  • Sacrificios: es una entrega, que Dios mira con agrado cuando sale de lo profundo del corazón. 

  • Diezmos: significa la décima parte, es decir, el 10% de lo que ingresa como dinero a mi hogar.

  • Ofrendas: es lo que yo separo, aparto voluntariamente para darle al Señor en una Célula, reunión, Escuela Kids.

  • Primicias: cuando le damos al Señor los primeros frutos, en agradecimiento por la provisión recibida. Le damos el primer resultado de algo. 

 

El Señor quiere que seamos fieles en dar lo que a Él le pertenece, que podamos dar nuestras ofrendas y diezmos al Señor, para recibir bendición y de esta manera, poder bendecir a otros. Estamos en una iglesia que ayuda a mucha gente que está en necesidad. Con nuestras ofrendas se mantiene cada iglesia con gastos de alquiler, luz, se ayuda a gente que está en situación de calle con viandas, la iglesia es una Fundación de ayuda a escuelas, comedores, barrios. 

Te motivo a que puedas ser de bendición: Con todos los integrantes de la Célula, juntar alimentos no perecederos, armar dos o tres bolsones de acuerdo con la cantidad de alimentos y salir a bendecir distintas familias que conocen y que están en necesidad. ¡Seamos de bendición!

 

Conclusión: Debemos dar nuestros diezmos y ofrendas al Señor.

 

Oración: Jesús bendice y santifica todo lo que me das día a día y que pueda bendecir a otras personitas.

 

Acción: Niño y preadolescente: Líder llevar distintas revistas para que los chicos armen un collage, usen su imaginación y puedan plasmar lo que la iglesia aporta con las ofrendas y diezmos que ellos dan. Por ejemplo: Ayuda a distintos comedores, escuelas, barrios, iglesias, etc.

Lunes 4 de agosto


 

¿QUÉ VEN NUESTROS OJOS?

 

“La lámpara del cuerpo son los ojos. Si miras a otros con ganas de ayudarles, todo el cuerpo está lleno de luz. Pero si con los ojos los miras con envidia, todo el cuerpo está en la oscuridad”

Lucas 11:34 (La Palabra de Dios para todos)

 

¿Cómo están tus ojos y qué están viendo?

 

1. Qué ver (Proverbios 4:20-21).

En este versículo podemos ver como Dios nos habla y nos dice que miremos adentro de nuestro corazón. ¿Qué cosas tenemos? De la misma manera tenemos que dejar que Su Palabra entre en lo profundo de nuestra vida, para que allí produzca resultados. Dios nos mira como Su obra completa. Pero nosotros tenemos que vernos como El nos ve.

2. La mirada en Jesús (Hebreos 12:2).

Jesús mira con ojos de amor nuestra vida, con ojos de perdón. Por eso decidió ir a la cruz y soportarla, ya que ella representaba todos nuestros males. Y Él decidió llevarla, en obediencia al Padre. ¡Por amor a vos!! No le importó la vergüenza, que pasaba cuando la cargaba, al contrario, siguió sosteniéndola.

3. ¿Qué ven mis ojos?

  1. Redes sociales, internet, Apps.

Tenemos que tener cuidado nuestros ojos, porque muchas veces nos engañan y pensamos que estamos viendo cosas buenas cuando en realidad no lo son.

Proverbios 14:12 Traducción en lenguaje actual

Hay cosas que hacemos
que nos parecen correctas,
pero que al fin de cuentas
nos llevan a la tumba.

 

Conclusión: Debemos cuidar mucho lo que miramos. Nuestros ojos deben estar puestos en Jesús.

Oración: Ayúdanos, Señor, a mirar siempre lo que es correcto y no bajar la mirada de Ti.

Acción: Niño: ¿Qué ven mis ojos? Dibújate mirando a Jesús como lo hacen los niños de la imagen y luego colorea.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Preadolescente: Realiza un acróstico y deberá tener frases o palabras relacionadas con el tema de la clase


 

                                                     M

                                                      I

                                                     S

   

                                                     O

                                                     J

                                                     O

                                                     S

Lunes 11 de agosto

 

EL PROBLEMA DE LA MALDAD

 

“Que mantiene Su amor hasta mil generaciones después y que perdona la maldad, la rebelión y el pecado; pero no tendrá por inocente al culpable…” Éxodo 34:7 (Nueva Versión Internacional)

 

Debemos cuidar nuestra relación con el Señor, no nos desviemos de Su camino por hacer lo malo.

 

1. La maldad (1 Juan 3:4).

Vivimos en un tiempo en el cual muchas cosas se muestran como buenas, que están bien, son normales o son lo que muchas personas sienten o quieren.

Pero, muchas veces esas cosas o elecciones que elijen las personas son en contra de la ley de Dios. Lo que Él estableció desde un principio es y será por la eternidad. Por eso, debemos tener cuidado de no pecar, no caer ante lo que nuestros amigos, compañeros o las redes nos muestran que está bien. Debemos cuidar nuestra vida de las maldades, de este mundo y siempre tener un corazón sensible al de Dios para que el sea Él quien nos hable y nos ayude a no caer en el pecado.

2. ¿De qué eres esclavo o estás preso?

A. Rebeldía, murmuración, queja, pecados ocultos, odio, tristeza, mentiras, peleas… (Isaías 53:6).

Jesucristo decidió ir por obediencia a la Cruz; se llevó nuestros pecados, los cargó sobre Sí. Para que los mismos ya no estén pesando en nuestra vida, por eso, amiguito, pedile ayuda a Dios para no caer en el pecado, no pecar, dejar de lado las peleas.

Busca ayuda, no hay nada más lindo que confesar, hablar lo que te está costando, habla con Jesús para entregarle a Él todas las circunstancias que atraviesas día a día.

 

Conclusión: Guardar nuestro corazón de lo malo, del pecado.

Oración: “Quítame la marca del pecado, y quedaré limpio. Lava todo mi ser, y quedaré más blanco que la nieve”. Salmos 51:7(TLA).

Acción: Niño: Señala el camino que deben seguir los niños para corregir lo malo en bueno y luego colorea.



 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 



 

 

Preadolescente: Haz una lista de aquellas acciones, actitudes, pensamientos, emociones que te superan y te dominan. Luego habla con tu líder para que te ayude y oren juntos.


 

Lunes 18 de agosto

 

EL PROBLEMA DEL PECADO

 

“Dios mío, Tú eres todo bondad, ten compasión de mí; Tú eres muy compasivo, no tomes en cuenta mis pecados”.

Salmos 51:1 (Traducción Lenguaje Actual)

Dios nos ama y debemos dejarle a Él todos nuestros pecados para que nos limpie y perdone.

 

1. El pecado:

A. Ensucia el alma, domina la mente (Salmos 51:2-3).

El diablo es tan engañador que siempre nos lleva a pecar, siempre nos pone tentaciones delante nuestro, para hacernos caer. Y después nos quiere hacer sentir culpable por lo que hicimos. Por eso muchas veces no podemos dormir.

Por ejemplo: sabés que no tenés que mirar películas de terror o jugar algún jueguito, y lo hacés de todos modos. Y después siempre el diablo te hace sentir culpable. Muchas veces te habla con pensamientos negativos para que no busques a Dios.

 

B. Deshonra al Señor, enferma el cuerpo (Salmos 51: 4,8).

Cuando pecamos tenemos que tomar la actitud que tuvo el rey David cuando declaró en Salmos 51:4 NTV: “Contra ti y solo contra ti he pecado; he hecho lo que es malo ante ojos”. 

 

C. Afecta, daña, contamina el espíritu (Salmos 51:10).

El pecado nos contamina, nos ensucia, nos hace sentir mal, nos enferma porque daña nuestro espíritu. Por tal motivo, te invito, a declarar la palabra del salmo, que Dios cree en vos un corazón recto, para no pecar.

 

2. Limpieza del pecado:

A. Confianza y confesión (1 Juan 1:9).

En nuestra boca tenemos el poder de la confesión, de hablar lo que hemos hecho y pedirle perdón a Dios por nuestros actos. No quedarnos callados sino, al contrario, hablar con tus padres, seños, líder de Célula para que te ayuden, dado que cuando sacamos las cosas a la luz, Dios nos puede ayudar.

 

B. Limpieza y consagración (1Juan 1:9).

Todos los días debemos limpiarnos, todo el tiempo debemos pedirle ayuda al Espíritu Santo para no pecar y que Él nos llene con Su presencia y nos lave. 

 

Conclusión: Orar siempre para no entrar en tentación.

Oración: Dios mío, ¡crea en mí un corazón limpio!

Acción: Niño: Querido líder, lleva dos corazones para cada niño. En uno de ellos los niños dibujarán aquellas cosas que ensucian su corazón (pecados) y en el otro ellos se dibujarán orando y entregando todo lo malo al Señor para que lo limpie con Su sangre.

Preadolescente: También se le entregará dos corazones, en uno de ellos escribirán todos sus pecados y en el otro escribirán los versículos del Salmos 51 según corresponda. Por ejemplo: si estás triste, amargado: “Devuélveme mi gozo y alegría” (Salmos 51:8).

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